está claro que hay que organizarse, pero el hecho de pensar a una hora vista sólo nos produce ansiedad y estrés, porque es un bucle infinito de tareas por hacer. y cuando encuentras un momento de descanso, tu mente te castiga y te hace sentir culpable con su martilleo incesante: "estoy tomando un café pero tengo que colocar el lavaplatos..."
es hora de tranquilizarse y salir de esa trampa mental. cuando te asalten pensamientos de ese tipo, contraataca pensando "haré lo que pueda, y ya estará bien". con este mantra consigues quitarte presión y comprender que no estás en un concurso para ver quién abarca más. si te mentalizas de que vas a hacer lo que puedas, ya te estás valorando por el simple hecho de intentarlo, sin esperar resultados cada vez más exigentes. y poco a poco "lo que pueda" se irá convirtiendo en "lo que yo quiera", y al fin te darás cuenta de que tú eres más importante que esa vocecilla odiosa que nos martillea la conciencia...
aplicado a los deportes, el "haz lo que puedas" te permite disfrutar de la actividad física con un sentido de continuidad, de aprendizaje, porque el mero hecho de salir a moverte ya es un logro. no te estás preparando para ganar una medalla olímpica, simplemente quieres mantenerte en buena forma, aprender cosas nuevas y divertirte. con el "hago lo que puedo" dejas de culparte y de avergonzarte porque un día te encuentres flojucho o perezoso, porque mañana lo intentarás otra vez y quizá llegues un poco más lejos. abandona las grandes metas y concédete el placer de premiarte por los pasitos más cortos que consigues. te dará alegría, satisfacción y confianza en ti mism@
foto: MacaRon, salzburg, austria
No hay comentarios:
Publicar un comentario