las chicas tenemos mucha presión. desde pequeñas, todas las miradas están sobre nosotras. miran lo que hacemos, lo que decimos. de jovencitas la presión va aumentando. nuestros cuerpos son imanes de miradas. nos miran los hombres con descaro. nos miran otras chicas para compararse. nos miran los más ancianos con nostalgia de juventud, nos miran las mujeres con celos por la frescura perdida. seguimos creciendo y la presión sigue en aumento. queremos ser madres, ocuparnos de nuestros hijos. queremos ser buenas hijas y ocuparnos de nuestros padres. queremos desarrollarnos en el trabajo. queremos tener voz. queremos que los hombres nos vean como iguales. queremos tener casas bonitas. queremos estar siempre guapas. queremos tanto que nos esforzamos mucho y cada vez más y más y más. nos creemos que esperan de nosotras grandes cosas, pero somos nosotras mismas quienes nos exigimos cada vez más y más y más...
aplicado a los deportes, las chicas juntas podemos llegar muy lejos. si aprendemos a relacionarnos entre nosotras como hacen las hermanas de cualquier especie, encontraremos nuestra fuerza. las mayores cuidan de las jóvenes, y las jóvenes de las mayores. cada una aporta lo que tiene, y todas ganamos porque reporta al grupo. en el deporte, y en la vida, tenemos que aprender que nuestra esencia está hecha de emociones, de sensibilidad, de intuición, de resistencia, de amor, de vida. son nuestras herramientas naturales para llenar el mundo de luz.
foto: anta. perpignan, france
Muy bonito. .. la unión hace la fuerza. Un abrazo
ResponderEliminar